Convierten el sol directo en una agradable luz difuminada. Además, ofrecen intimidad impidiendo que nos vean desde el exterior. Este tipo de tela es la ideal para habitaciones, estudios, oficinas, etc,,
Los paneles japoneses transforman la intensidad de los rayos solares en una luz natural difuminada y cálida. Y a su vez, nos aislan del exterior impidiéndonos ser vistos. Por eso tienen una doble ventaja. Son perfectos para habitaciones soleadas, oficinas, gimnasios y mucho más.
Además, disponen de unas características propias que no encontrarás en otros paneles o telas. Por ejemplo, son porosos y extremadamente ligeros. A su vez, son flexibles y muy resistentes a la torsión. Son sutiles y estilizados.
Puedes usar los paneles japoneses para lo que creas conveniente, por ejemplo, para reducir la intensidad lumínica de tu habitación. También para ofrecerte intimidad a la hora de trabajar mientras aprovechas la luz natural y te libras de la luz artificial.
Por otro lado, puedes usarlas de forma decorativa y estética, pues hay múltiples acabados y puedes elegir los paneles japoneses por su color.
Medir el ancho será muy sencillo, solo tienes que ir de extremo a extremo y anotar la medida sumándole 5 cm a cada lado.
Respecto al alto, haz lo mismo, mide de forma vertical y luego añade algunos centímetros. En este caso, añade 10 cm arriba y hasta 15 o 20 cm debajo.
Todos los paneles japoneses que encontrarás tienen magníficos acabados. De hecho, puedes encontrar una amplia variedad, también de colores. Tonos cálidos, azulados, oscuros… Y todos ellos son minimalistas y elegantes. Combinan bien con muchos tipos de estancias.
Puedes accionar tu panel japonés con solo un botón, aunque también puedes hacerlo de forma manual. Tú eliges dónde instalar el accionamiento, a derecha o izquierda, será muy sencillo.
Respecto a la protección y seguridad, debes saber que los materiales de los paneles japoneses son inmejorables. Sus tejidos se fabrican con pequeños filamentos de fibra de poliéster o vidrio y al final se recubren de PVC. Esto es lo que les hace resistentes y también aptos para protegerte de los rayos UVA.
No necesitas lavar demasiado tus paneles japoneses, una vez al mes será más que suficiente. Puedes emplear agua, detergente neutro y nunca un blanqueante óptimo. Extiéndelo todo con un paño o trapo y luego déjalo secar.
Si ya has pedido tu panel japonés, solo tendrás que esperar un máximo de 5 días laborables.
Hay dos tipos de instalación. Seguramente ya las conoces. Una es vertical, instalación en el techo. Y la otra es horizontal, instalación en la pared. Tú eliges la que mejor se va a acomodar a tu estancia.
Porque son resistentes, te protegen de los cambios de temperatura y de los rayos UV. Son duraderos, estéticos y los puedes conseguir en diferentes colores. Van bien para terrazas, azoteas, oficinas, habitaciones, salas de estar y mucho más.
| Composicion Tela | 100% Poliester |
|---|---|
| Resistencia al fuego | No |
| Factor de apertura | No permite ser visto tanto desde fuera como dentro |
| Tipo de instalación | Atornillado a la pared o techo |
| Tipo de apertura | Enrrollamiento vertical |
| Lugar de instalación | Para puertas |
| Resistencia bacterias | No |
| Resistencia a la Luz | Si |
| Filtro solar | Sí |
