Cómo colocar la cuerda de una persiana enrollable

¿Se te ha roto la cuerda de la persiana y no sabes por dónde empezar? No hace falta llamar a un técnico ni desmontar toda la persiana. Con un poco de paciencia y las herramientas adecuadas, puedes cambiar la cuerda tú mismo en menos de una hora.
En esta guía te explicamos cómo colocar la cuerda de una persiana enrollable paso a paso, con trucos que solo se aprenden tras años de reparaciones. ¿Listo para dejar tu persiana como nueva sin gastar de más?
Herramientas y materiales necesarios
Antes de empezar, conviene tener todo preparado. Cambiar la cuerda de una persiana enrollable es más fácil si no tienes que interrumpir el trabajo para buscar algo. Las herramientas básicas suelen estar en cualquier caja de bricolaje, y los materiales son económicos.
Necesitarás:
- Destornillador: para retirar el recogedor y abrir el cajón.
- Cuerda o cinta nueva: del mismo ancho y largo que la anterior.
- Tornillos y topes: en caso de que los antiguos estén dañados.
- Tijeras y mechero: para cortar y sellar los extremos de la cuerda.
- Guantes de protección: evitan cortes al manipular el tambor o la polea.
Asegúrate de comprar recambios compatibles con tu modelo de persiana. Las cintas de poliéster o algodón trenzado suelen durar más, y conviene elegir una longitud generosa para evitar que quede corta.
Preparación antes de cambiar la cuerda
Antes de iniciar el cambio, es importante preparar bien el área de trabajo y asegurarte de que todo esté en orden. Así evitarás errores y trabajarás con mayor comodidad. También puedes aprender técnicas útiles sobre aislar tambores de persianas para mejorar el aislamiento mientras haces la reparación.
- Baja la persiana por completo. Mantén las lamas cerradas para liberar tensión y facilitar el acceso al cajón.
- Fija la persiana con cuidado. Usa cinta adhesiva o un soporte para evitar que se mueva mientras manipulas el sistema.
- Retira los topes inferiores. Desatorníllalos con precisión y guárdalos, ya que los volverás a colocar al final del proceso.
- Abre el cajón de la persiana. Hazlo despacio para no dañar el embellecedor o la pintura. Observa cómo está colocada la cuerda y el tambor.
- Haz una foto antes de desmontar. Servirá como guía visual para colocar todo igual al terminar.
- Limpia el interior del cajón. El polvo y la suciedad pueden hacer que el nuevo sistema funcione peor o se desgaste antes.
- Verifica el estado del tambor y la polea. Si están deformados o con óxido, conviene sustituirlos junto con la cuerda.
Sustitución y colocación de la nueva cuerda
Empieza por soltar la cuerda vieja del tambor o rodillo. Si está muy deteriorada, corta y elimina los restos. Luego pasa la nueva cuerda por la polea superior y guíala hasta el recogedor inferior, siguiendo el mismo recorrido que la anterior.
Para fijarla correctamente:
- Haz un pequeño nudo en el extremo superior para evitar que se deslice.
- Enrolla la cuerda alrededor del tambor asegurando que quede bien alineada.
- Comprueba que no roce los bordes del cajón ni se cruce en el recorrido.
Una vez instalada, tira varias veces de la persiana para comprobar la tensión. Si notas que baja o sube con dificultad, reajusta la cuerda antes de cerrar el cajón.
Errores comunes y cómo evitarlos
Incluso con las mejores herramientas, pueden surgir fallos al colocar la cuerda. Identificar los más habituales te ayudará a evitarlos y ahorrar tiempo.
Cuerda demasiado tensa o floja
Si la cuerda queda muy tensa, la persiana puede bloquearse o desgastarse rápido. En cambio, si está demasiado floja, no se recogerá bien. Ajusta la tensión girando el tambor poco a poco hasta que el movimiento sea suave y equilibrado.
Un truco útil es probar varias veces la subida y bajada antes de fijar el recogedor. Si notas resistencia o ruidos extraños, revisa la alineación del eje y la polea.
Enredos dentro del cajón
Los enredos suelen aparecer cuando la cuerda se introduce torcida en el tambor. Para evitarlo, comprueba que la cuerda entra en línea recta. Si ya está enredada, suelta el extremo del recogedor, desenrolla completamente y vuelve a montar con cuidado.
En cajones pequeños, la falta de espacio puede complicar el proceso. En esos casos, usa una linterna para ver mejor el interior y no forzar piezas.
Problemas con la guía o el eje de la persiana
Cuando la persiana no sube o baja bien, puede que el problema no esté en la cuerda. A veces las lamas se salen de las guías o el eje está descentrado. Revisa visualmente ambos elementos. Si hay fricción o ruidos, limpia las guías con un paño húmedo y aplica un poco de lubricante seco.
Un eje mal alineado puede hacer que la cuerda se desgaste antes de tiempo. Ajustarlo es sencillo: basta con aflojar los soportes y recolocar el rodillo en posición recta.

Preguntas frecuentes sobre la cuerda de la persiana
Estas son algunas dudas habituales de quienes quieren reparar o sustituir la cuerda de su persiana enrollable por su cuenta. Si buscas más ideas sobre cómo arreglar la cuerda de una persiana, consulta esta guía para arreglar cuerda de persianas y reforzar tus conocimientos.
¿Puedo cambiar la cuerda sin desmontar la persiana?
Sí, en la mayoría de los casos no es necesario desmontar todo el sistema. Solo debes acceder al cajón y al recogedor. Trabaja con la persiana bajada y el eje sin tensión. Si tu modelo tiene poco espacio, utiliza herramientas finas para guiar la cuerda sin dañar el tambor ni la polea.
¿Qué tipo de cuerda es más resistente?
Las cuerdas de poliéster trenzado son las más duraderas. Resisten la fricción, la humedad y mantienen su forma con el uso. También son adecuadas las de algodón grueso, aunque se desgastan antes. Elige siempre una cuerda compatible con el ancho del recogedor y del tambor para garantizar un funcionamiento suave y seguro.
¿Dónde comprar recambios de calidad?
Puedes adquirirlos en tiendas especializadas en persianas y mosquiteras o en ferreterías con repuestos certificados. Evita productos genéricos sin especificaciones claras, ya que podrían no encajar bien. Busca siempre indicaciones sobre compatibilidad y materiales, así aseguras una reparación duradera y un mejor rendimiento del sistema.
Cambiar la cuerda de una persiana enrollable es una tarea sencilla si sigues los pasos adecuados. Con las herramientas correctas y un poco de cuidado, puedes dejar tu persiana como nueva sin ayuda profesional. Mantenerla limpia y revisar la cuerda periódicamente alargará su vida útil y evitará futuras averías.













